La Asociación Catalana de Franquiciadores aprueba la entrada de franquiciados en su estructura
La Asociación Catalana de Franquiciadores (ACF) ha aprobado, en una asamblea general extraordinaria celebrada el pasado 16 de septiembre, la admisión de franquiciados dentro en la asociación. La decisión se tomó “por unanimidad” y, en la práctica, supone que los franquiciados tendrán voz y voto, y que podrán formar parte de la junta directiva de la asociación.
Tras un debate interno que, según fuentes de la asociación, ha durado más de un año, la ACF ha aprobado la entrada de franquiciados en su estructura. De este modo, su sede del Paseo de Gracia aspira a convertirse en “un centro de encuentro, debate y colaboración entre las dos partes implicadas” en el sistema de franquicias en Cataluña.
La decisión de crear un foro para la defensa común de los intereses de franquiciadores y franquiciados sigue la estela dejada por otros muchos países donde ambas partes ya se encuentran integradas en una misma asociación, como en los casos de Reino Unido, Bélgica, Francia, Portugal, Brasil o EE.UU. En este último país, se da la circunstancia de que en más de una ocasión un franquiciado ha estado al frente de la asociación que representa a ambas partes.
En este sentido, la ACF, que se convierte en pionera en España al abrir su asociación a los franquiciados, mantiene informada de su decisión a la Asociación Española de Franquiciadores (AEF) –de cuya junta directiva forma parte–, la cual está siguiendo un proceso similar de apertura de su estructura social".
Cambio de nombre: de ACF a AFC
La entrada de franquiciadores en la ACF conlleva un cambio en el nombre de la asociación, que pasa a llamarse Asociación de Franquicias de Cataluña (AFC), y la modificación de sus estatutos. También se harán constar los cambios en el Registro de Asociaciones del Departamento de Justicia de la Generalitat de Catalunya.
La Asociación Catalana de Franquiciadores cuenta con cerca de 50 socios que tienen sus sedes centrales en Cataluña, donde el sistema de franquicias está formado por más de 300 marcas, según datos de la propia ACF.
Criterios dominantes en Europa
La incorporación de franquiciados dentro de la estructura de la ACF se hace siguiendo los criterios dominantes recogidos en un informe de la Federación Europea de la Franquicia (EFF) del mes de abril de 2018.
Dicho informe constata que, a medida que se desarrolló el sistema de franquicias, en algunos países aparecieron asociaciones de franquiciados (organizadas por franquiciados de una marca concreta o bien de carácter general) orientadas, básicamente, a presionar a los reguladores legales para que hicieran una estrecha vigilancia de las relaciones franquiciador -franquiciado. Inicialmente, la IFA (USA), la BFA (Reino Unido), la FFF (Francia) y la BFA (Bélgica) consideraron un riesgo de enfrentamientos indeseables la proliferación de este tipo de asociaciones, teniendo en cuenta el espíritu de colaboración en la que se basa del contrato de franquicia.
Por ello, las entidades citadas y otras que se van añadiendo (Portugal, España, etc.) se han movido o se están moviendo hacia:
- Definir y estructurar la asociación, hasta ahora franquiciadora, como una entidad que incluya franquiciadores y franquiciados, con la vista puesta en el diálogo y trabajando juntos por objetivos compartidos y comunes.
- Implementar la representación de los franquiciados en sus juntas directivas.
Todas las asociaciones que ya han implementado esta política inclusiva consideran el resultado como muy positivo desde diferentes puntos de vista:
- Implicados directos: Estar juntos, franquiciador y franquiciado, en una misma asociación fomenta el espíritu de colaboración, particularmente en asuntos sensibles. Trabajar y aprender uno del otro facilita saber compartir y confiar, generando sinceridad y transparencia con una visión más profunda y a largo plazo.
- Sistema de franquicias: Sean o no miembros de la asociación nacional correspondiente, las personas, empresas y entidades relacionadas con la franquicia, perciben positivamente que los intereses de franquiciadores y franquiciados sean interdependientes y compartidos.
- Mercado, en general, incluyendo franquiciados futuros y franquiciadores: Tienen una percepción positiva de la cultura de diálogo generada y da una mayor confianza.
- Reguladores legales: Reduce la percepción de que la relación entre las partes está desequilibrada, a favor del franquiciador, reforzando el papel de la franquicia como modelo empresarial.
- Asociaciones nacionales: Compartir los puntos de vista con los franquiciados y las experiencias de las dos partes, amplía el debate, facilita la resolución de problemas y desarrolla posiciones convergentes en una atmósfera de sinceridad.