Es importante conocer los beneficios de la Cultura Preventiva, pues al margen de los motivos morales, éticos o forzados por la legislación vigente, la integración de la prevención en el sistema de gestión de la empresa.
Es importante conocer los beneficios de la Cultura Preventiva, pues al margen de los motivos morales, éticos o forzados por la legislación vigente, la integración de la prevención en el sistema de gestión de la empresa, nos permite alcanzar mayores tasas de rentabilidad, eficiencia y satisfacción con toda la empresa.
Las empresas que tienen consolidada una buena gestión de la salud y la seguridad, además de distinguirse por sus elevados estándares de calidad, tienen sus riesgos bajo control y experimentan mejoras progresivas en la incidencia de accidentes y enfermedades derivadas del trabajo.
Uno de los retos del sector de la Prevención de Riesgos Laborales, es la cuantificación de la rentabilidad en la inversión de la seguridad laboral. El Informe desarrollado por la Asociación Española para la Calidad (AEC) estima que por cada euro invertido en seguridad y salud laboral, el rendimiento es de 2,2 euros de retorno.
Además de la rentabilidad, hay otros muchos beneficios objetivos que se derivan de tener una buena cultura preventiva. A continuación mostramos los más relevantes:
- Reducción de bajas laborales: las medidas preventivas permiten reducir los índices de siniestralidad laboral y las enfermedades derivadas del trabajo. Con ello, evitaremos alteraciones en la producción, reduciremos las bajas por enfermedad y tendremos menores costes administrativos y legales. Además, ciertos accidentes laborales pueden generar costes directos inasumibles que pudieran frenar el crecimiento.
- Mejora de la imagen de empresa: las consecuencias de no contar con medidas preventivas de seguridad pueden generar incidentes que nos hagan perder clientes, contratos, imagen de marca o reputación de la empresa.
- Mejorar la motivación de los trabajadores: los problemas de salud de los trabajadores pueden llegar a duplicar el nivel de absentismo por enfermedad, generando poca implicación y motivación de la plantilla, que podría resolverse si prestamos atención a las condiciones higiénicas y de seguridad laboral.
En conclusión, si apostamos por integrar la cultura preventiva dentro de la gestión de la empresa, aseguraremos unas buenas condiciones de seguridad y salud laboral que nos permitirán reducir riesgos, minimizar imprevistos, ampliar productividad, y en consecuencia mejorar la rentabilidad de la empresa.
La Prevención de Riesgos Laborales es una inversión segura y con retorno directo.
